Cupcakes de Vainilla con Chips de Chocolate y Nutella®


Clásicos.
Buenos.
Rebuenos.

Unos cupcakes que no pasan desapercibidos y que se convierten en un pecado casi carnal por aquello del "placer adulto".

Y, como soy amante de la diversidad, os presento tres tipos de decoración. ¡Más vale que sobre a que falte!

La number one:

Decoración con rosetones

La number two:

Decoración floral

Y la number three:

Decoración clásica

Hoy voy a ser breve, pues poco más podemos decir de esta delicia tan deliciosa, jajajajaja.

Vamos sacando los cachivaches pertinentes y ¡COMENZAMOS!



CUPCAKES DE VAINILLA CON CHIPS DE CHOCOLATE Y NUTELLA®


Necesitaremos para unos 12 cupcakes...

Para el bizcocho:
  • 115 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
  • 220 gr. de azúcar blanco
  • 3 huevos talla L
  • 300 gr. de harina de trigo
  • 1 cucharadita y 1/2 de levadura química o polvo de hornear
  • 1/2 cucharadita de sal
  • 120 ml. de buttermilk (120 ml. de leche entera + un buen chorreón de zumo de limón)
  • 1 cucharada de vainilla en pasta
  • Un camión de gotas de chocolate
Para la buttercream:
  • 250 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
  • 325 gr. de azúcar glasé o icing sugar
  • Una tonelada de Nutella®

¡Así los preparamos!

EL BIZCOCHO

1. Precalentamos el horno a 180ºC, con calor arriba y abajo. Cogemos un molde para cupcakes y colocamos en el 12 cápsulas de papel.

2. Preparamos la buttermilk mezclando la leche con el zumo de limón. Removemos bien e incorporamos la vainilla en pasta. Reservamos durante al menos 10 minutos.

3. Tamizamos la harina junto con la levadura química o polvo de hornear y la sal. Reservamos.

4. Ponemos la mantequilla y el azúcar en nuestra batidora/amasadora. Si no disponemos de una, la batidora de varillas nos vale perfectamente. Batimos hasta obtener una mezcla blanquecina y esponjosa.

5. Añadimos los huevos UNO A UNO. No echamos el siguiente hasta que el anterior no esté bien integrado.

6. Cogemos 1/3 de nuestra mezcla de harina y la vertemos sobre la mezcla anterior, batiendo a velocidad baja. Ahora echamos la mitad del buttermilk que hemos preparado anteriormente. Sin dejar de mezclar, volvemos a verter otro 1/3 de harina y el resto de la buttermilk. Acabamos echando el resto de la harina.

5. Paramos la máquina y con una espátula de silicona incorporamos las gotas de chocolate. Os dejo que echéis cuántas queráis, ¡pero no os paséis, pecadores/as!

6. Con ayuda de una cuchara de hacer bolas de helado, repartimos la masa en las cápsulas para que queden todas igual de llenas. Pero... ¡ATENCIÓN! ¡No llenéis más de 2/3 de cada cápsula porque la liamos parda!

7. Metemos nuestros cupcakes en el horno por un periodo de 10-12 minutos a 180ºC. Comprobamos que están listos pinchando con un palito en el centro. Si éste sale limpio, ya podemos sacarlos del horno.

8. Pasados unos 5 minutos, ponemos nuestros cupcakes a enfriar sobre una rejilla.

9. Mientras se enfrían, preparamos la buttercream.

LA BUTTERCREAM

1. Ponemos la mantequilla a temperatura ambiente junto con el azúcar glasé tamizado y batimos a velocidad baja. CONSEJO: Tapad vuestra batidora/amasadora con un trapo de cocina si no queréis ponerlo todo perdido.

2. Una vez que ambos ingredientes se han integrado por completo, aumentamos un poco la velocidad y vamos añadiendo poco a poco la Nutella®. ¡Yo por pocas le hecho un bote entero! Jajajaja. No os paséis echando Nutella®, pues nuestra buttercream puede quedar demasiado blanda y luego es imposible manejarla para decorar.

3. Con nuestra buttercream preparada y nuestros cupcakes fríos, cogemos una manga pastelera desechable y le colocamos la boquilla que queramos (yo he utilizado la 1M de Wilton®). La rellenamos con la crema y decoramos al gusto. Yo os he propuesto tres opciones, pero podéis hacerlo como queráis. 

Y hasta aquí llega esta recetaca. Apta para todos los públicos, con especial atención a los/as chocoadictos/as. Espero foticos de vuestras creaciones.




Un abrazo de los grandes,
Monsieur Citron.



Tarta húmeda de Chocolote y Huesitos®


Voilà!

La tarta más FEA y RICA del mundo ya forma parte de este blog, jajaja.
Qué contradicción más contradictoria, ¿no? Pues, aunque no lo creáis, la estética no siempre va estrechamente unida al sabor. Os lo voy a demostrar con esta receta.




Bien es sabido que las calurosas tardes de verano, para el "desoficiáo", dan para mucho. Y el día que esta tarta vio la luz del día por primera vez, a parte de calor, también había al menos dos desoficiáos. Porque, claro, he de decir que éste no es sólo el resultado de unas manos inexpertas como las mías, sino también de la ayuda incondicional de mi, por una tarde, pinche de cocina Inma. 

La verdad es que ambos barajábamos varias opciones: que si tarta de zanahoria y queso, que si cupcakes de chocolate, ... El caso es que, de una manera u otra, siempre íbamos a parar a algo relacionado con comida y, por supuesto, ¡dulce! (Estábamos to' "sucrés" aquel día).

Tras un gran periodo de deliberación mediante Whatsapp, llegamos a un trato de común acuerdo en el que quedaba estipulada como cláusula principal y mayoritaria la TARTA DE CHOCOLATE Y HUESITOS®.




Total, que el bizcocho estaba claro como iba a ser, pero la buttercream de relleno y decoración no tanto... Si algo tenía claro es que los Huesitos® iban a formar parte de la buttercream, pero... ¿cómo? 

Pensé que haciendo una buttercream simple y añadiendo unos cuantos Huesitos® troceados, sería más que suficiente. Sin embargo, el tema de las cantidades cuando me pongo a inventar no lo termino de llevar yo muy bien. Una vez tenía terminada la buttercream, el resultado era óptimo y quedé muy contento. Pero, adivinad qué paso... ¡Hostia puta! - exclamé. No era suficiente como para rellenar y decorar, por lo que me quedé "compuesto y sin crema".

Tomé un disgusto de los grandes, de "los culinarios", que yo llamo. Yo decía: "la Virgen Santa, ¡qué cosa más fea!"; "esto se lo das a los chinos y no lo quieren"; entre otras muchas. Mi pinche, en su afán de darme ánimos, exclamaba: "¡Que no, hombre!, que esto está buenísimo"; "No seas tonto y no le toques más, anda".

Finalmente, tras mucho insistir por su parte, opté por realizar la sesión fotográfica de la tarta. Una vez terminada, decidí cortar un trozo para ver cómo estaba, porque ya no me aguantaba más. Pues... ¿qué puedo deciros...? Los ojos se me salían de las órbitas, y el siguiente bocado era más grande que el anterior. ¡Chachos/as, qué cosa más buena! ¡Cuándo nos hemos visto en otra! Jajajajaja.




Si os parece, os desvelo ya los secretos para preparar la tarta más FEA y RICA del mundo. Manos limpias y comenzamos en... 3...2...1... ¡YA!



TARTA HÚMEDA DE CHOCOLATE Y HUESITOS®
(La receta del bizcocho la tomé de la web amiga de La Cocina de Morilands)
(La receta de la buttercream es orginal del Blog La Cuisine de Monsieur Citron)


Necesitamos...

Para el bizcocho
  • 230 gr. de chocolate negro (yo he utilizado el de Nestlé® Postres)
  • 170 gr. de mantequilla
  • 350 gr. de azúcar moreno
  • 3 huevos grandes
  • 1 cucharadita y 1/2 de levadura
  • 1 cucharadita y 1/2 de bicarbonato sódico
  • Una pizca de sal
  • 370 gr. de harina de repostería
  • 500 ml. de leche
  • Una cucharadita de extracto de vainilla
Para la buttercream
  • 450 gr. de mantequilla en textura de pomada (yo utilicé 300 gr. y me faltó)
  • 450 gr. de azúcar glass o icing sugar (yo utilicé 300 gr. y me faltó)
  • 1 cucharadita de leche (opcional) 
  • 8 Huesitos® picados

Así la preparamos...

El Bizcocho húmedo de Chocolate

1. Precalentamos el horno a 180ºC, con calor arriba y abajo.

2. Derretimos el chocolate negro en el microondas tapándolo con papel film. Pondremos la potencia del microondas a la mitad e iremos calentando el chocolate en intervalos de 30 segundos para que no se nos queme. Dejamos entibiar.

3. Batimos los huevos hasta que espumen y aumenten su tamaño. Añadimos el azúcar y la mantequilla.

4. Mezclamos la harina con la levadura y el bicarbonato sódico. Lo tamizamos todo y reservamos.

5. Vertemos 1/3 de la mezcla de harina sobre los huevos y echamos un buen chorro de leche. Vamos alternando hasta acabar echando harina.

6. Añadimos la vainilla y el chocolate derretido en forma de hilo, por si éste aún sigue un poco caliente y estropea la masa.

7. Engrasamos un molde de 20 cm de diámetro o 3 moldes para layer cake (cualquiera de las dos opciones es válida). Repartimos la mezcla a partes iguales con una cuchara de helado y llevamos al horno por un periodo de 30 minutos aproximadamente. Comprobamos que están listos pinchándolos con un palito, y si éste sale limpio, ya los tenemos.

8. Pasados 5 minutos, sacamos los bizcochos de sus moldes y dejamos enfriar por completo sobre una rejilla.

La Buttercream de Huesitos®

1. Ponemos la mantequilla y el azúcar glass o icing sugar en nuestra KitchenAid®. (Si no disponéis de una, podéis hacerlo con una batidora de varillas convencional o incluso con las varillas de mano). Mezclamos a velocidad media.

2. Cuando esté todo bien integrado, añadimos los Huesitos® que previamente hemos picado. Este paso recomiendo hacerlo manualmente con una espátula.

3. Es el momento de añadir la cucharadita de leche si vemos que la crema nos ha quedado demasiado dura.

¡Rellenamos y decoramos! (Bueno, yo en mi caso sólo rellené, jajaja)

1. Ponemos un pelín de crema sobre una base de cartón y centramos el primer bizcocho.

2. A mí me gusta que las diferentes alturas de las tartas siempre sean lo más iguales y perfectas posibles, por lo que me ayudo de una cuchara de helado para rellenarla con la misma cantidad.

3. Ponemos la siguiente capa de bizcocho y volvemos a rellenar.

4. Colocamos el último bizcocho pero esta vez sin rellenarlo. Ponemos una capa fina "sujeta-migas" de crema por toda la tarta y llevamos al frigo hasta que endurezca un poco.

5. Terminamos de decorar al gusto con la crema restante.



¡Esto es todo, amigos/as!

À la prochaine,
Monsieur Citron.